El papel sigue la tendencia al alza
1 de Octubre de 2004 - numero_12
El Grupo COFACE proporciona a las empresas productos y servicios relativos al Seguro de crédito con el objetivo de facilitar el comercio internacional. Sus consultores alrededor del mundo mantiene a sus oficinas informadas tanto sobre la economía global, como de empresas en particular, para la elaboración de informes crediticios y de evaluación de riesgo relativo a cada sector de actividad.
Su informe periódico revela que la mayoría de los sectores de actividad presentan una situación económica favorable dentro de un contexto de crecimiento mundial sostenido y de dinamismo de las exportaciones. Este entorno favorable ha causado un sobrecalentamiento en algunos sectores, afectando incluso al de pulpa o pasta usada como materia prima para la producción de papel.
No obstante, la reactivación no ha reforzado necesariamente las cuentas de las empresas que tienen que hacer frente no sólo a los precios elevados del petróleo sino también al aumento de los precios de las materias primas, así como a las presiones sobre las tarifas de los fletes.
Panorama económico del sector papelero internacional
La aceleración de la actividad se confirma en la industria del papel. En estas condiciones, el aumento concomitante de los precios de la pasta o pulpa y del papel reciclado ha repercutido sobre los precios de venta, presentándose dificultades para los comerciantes mayoristas y los procesadores más cercanos al consumidor final.
La mejora fue marcada en Estados Unidos, donde la demanda y los precios están orientados al alta y deberían todavía aumentar más en los próximos meses para todos los productos. La concentración industrial lograda en los últimos años permite tener la capacidad de producción bajo control. Además, la industria doméstica se encuentra menos presionada, por parte de las importaciones, debido al descenso del dólar americano en los últimos meses.
Los fabricantes de papel canadienses se encuentran en una situación menos ventajosa, debido a la revalorización de su moneda frente al dólar americano, que ha hecho que disminuya el valor de las ventas realizadas a EE.UU. La mejora registrada en el volumen y en el valor nominal de las exportaciones a Estados Unidos y Asia no tuvo una repercusión integral sobre los parámetros financieros. Además, sus actividad forestales se han visto afectadas por los derechos de aduana compensatorios aplicados por Estados Unidos sobre las exportaciones de madera y derivados procedentes de Canadá.
La tendencia positiva fue más discreta en Europa en razón de una demanda interior más tímida, a pesar de la buena marcha de las exportaciones hacia Asia y Estados Unidos.
En Asia, el mercado ha estado conducido por la explosión de la demanda china, que el desarrollo de las capacidades domésticas ha podido satisfacer. Las industrias papeleras de la región, especialmente los fabricantes japoneses, se benefician de este desequilibrio y de un aprovisionamiento desahogado de materia prima.
En América Latina, los exportadores de pasta brasileños y chilenos se benefician de una competitividad acrecentada gracias a una tasa de cambio favorable y de una materia prima económica. Su situación debería incluso mejorar con el continuo aumento de los precios mundiales y las crecientes necesidades asiáticas. A la inversa, los fabricantes de papel orientados hacia el mercado regional, y sobre todo los que no integran la producción, se vieron afectados por el aumento de los precios de la pulpa que se les factura en dólares y por una demanda local todavía débil.