2009, el octavo año de El Papel

Hace 7 años el primer editorial prometía: “Tenemos la seguridad que El Papel, revista especializada en el ramo librero-papelero, cumplirá en ésta y en sus posteriores entregas el propósito de satisfacer las necesidades de comunicación del sector”.

Era una expresión que surgía del sueño fundador que engendró esta publicación. Hoy, mas cerca de la década que del primer año, podemos decir que esta promesa no se transformó -como suele suceder con demasiada frecuencia- en palabras que se lleva el viento y que posteriormente nadie recuerda.

Después de 7 años de trabajo hemos crecido y circulamos en toda Latinoamérica haciendo lo que ofrecíamos desde el primer número: informar y generar puntos de encuentro para quienes construyen este sector. Quienes nos han acompañado -prácticamente todos los que están en actividades relacionadas con la librería-papelería- saben que no descansamos y que seguimos trabajando para “satisfacer las necesidades de comunicación del sector” (como decíamos al comienzo). Para lograrlo hemos ido ampliando nuestro espacio de trabajo que ahora incluye las publicaciones digitales y también la organización de un encuentro anual en donde los compradores y vendedores se reúnen para hacer lo que mejor saben: comprar y vender en un espacio especialmente preparado y en el lugar donde todas las rutas confluyen. Hablamos del Marketplace of the Americas en Miami, un concepto que año a año se afirma como la mejor manera de encontrarse, sin pérdidas del tiempo y con la calidez que caracteriza a nuestra región.

Comienza 2009, el octavo año para El Papel. Un año que los expertos pronostican como “duro” . Sabemos, llevamos casi una década recorriendo todos los caminos, que nuestro sector tiene la capacidad necesaria para superar tiempos difíciles. Es fundamental no perder nuestro norte y para eso nunca está demás una buena carta de navegación que nos indique dónde estamos y a dónde podemos llegar. Es lo que pretendemos que sean nuestras publicaciones y nuestros encuentros: herramientas orientadoras. Siempre necesarias pero ahora mas que nunca.

Podríamos expresar un típico saludo. Preferimos poner en sus manos nuestro último número. Es nuestra manera de decirles que confiamos en que entre todos podemos hacer del 2009 un muy buen año. Yes, we can.