Innovación abierta: Mas que inventar, tenemos que obtener resultados

Las empresas que buscan crecer se ven en la necesidad de renovar sus estrategias de mercado para ser más competitivas. No es extraño toparse con términos como “innovación” en esa búsqueda, aunque no siempre esté claro qué significa.

Xavier Marcet, docente en el IDEC de la Universidad Pompeu Fabra, es experto en innovación estratégica y en prácticas que nos dicen cómo hacer que las ideas impacten en el mercado.

Desde el final

Marcet sostiene que su visión de la innovación “empieza desde el final”. Primero se establecen los resultados que quieren conseguirse o los que ya se han logrado. “Hay que preguntarse, como empresa, cuántos de sus ingresos están vinculados a productos o servicios que no existían hace dos años”, señaló.

Un punto importante de esta visión es el alejamiento de la tecnología, muchas veces identificada como sinónimo de innovación. En realidad, “no importa si hemos creados productos tecnológicos o si hemos cambiado el modelo de negocio para un mismo servicio, estamos hablando de innovación”.

Innovación abierta

De esta manera, Marcet define la innovación abierta como una manera de conseguir resultados de negocio gracias a la implementación de nuevos productos, servicios o modelos que antes no existían en nuestra organización. “Podemos tener todas las ideas del mundo y no innovar nada, hay que tener resultados”, dijo.

Esta redefinición del concepto tradicional de innovación abre puertas hacia nuevas oportunidades de negocio. “Cada vez hay más empresas que se están enfocando en llevar a cabo ideas que pueden haber salido de ellas o de otros”, explicó.

¿Cómo dar el salto de las ideas a los resultados? Marcet señala que hay dos aptitudes fundamentales para llegar a buen puerto. La ambición de querer servir mejor al cliente y crecer como organización, y la humildad, ya que a veces el éxito empresarial hace olvidar que también existe vida inteligente afuera de la que se puede aprender.

Involucrar a toda la organización

Ejecución. “Un problema común en muchas empresas es que tienen buenas ideas, pero no son buenas para ejecutarlas”, advirtió Marcet. Para materializar los aportes innovadores, él propone un sistema de trabajo que convoca a un equipo multidisciplinario y transversal a todas las áreas de una organización, con especial énfasis en aquellas que atienden directamente a los clientes.

Fuente: Revista Gestión – Perú