Para tranquilidad de los mercados, China promete cumplir con meta de crecimiento
31 de Julio de 2013 - Destacados
Las autoridades de China, conscientes del riesgo de que una fuerte desaceleración económica descarrile sus esfuerzos por aplicar reformas, enviaron el miércoles la señal más clara hasta el momento de que salvaguardarán el crecimiento y ajustarán la política fiscal cuando sea necesario.
Un mensaje emitido tras una reunión el martes del organismo de mayor autoridad en China, el Politburó, buscó dispersar las preocupaciones del mercado sobre las perspectivas de expansión a corto plazo para el país, al poner énfasis en la necesidad de alentar una expansión estable.
La principal agencia de planificación económica de China se sumó al mensaje el miércoles asegurando que la meta de crecimiento de este año no estaba en riesgo y que las autoridades brindarían a los mercados un financiamiento relativamente abundante.
“Creemos que el punto central del mensaje es la estabilidad luego del caos innecesario generado por el mercado interbancario en junio, mientras que el Partido (Comunista) sigue enviando señales de que el nuevo liderazgo está a favor de una reforma pese a las recientes confusiones”, dijeron analistas de Bank of America Merrill Lynch en una nota.
Los nuevos líderes de la nación se han comprometido a reducir la adicción de China a un crecimiento basado en las exportaciones y el flujo de créditos, en favor de una economía cuyos avances estén basados en el consumo, dejando en claro que aceptaría cierto nivel de desaceleración como consecuencia de esta transición.
De todas formas, la combinación de un menor crecimiento, la expansión de créditos y el rápido avance de los mercados inmobiliarios ha mantenido cautelosos a los inversores, puesto que su preocupación inmediata es que la expansión caiga muy por debajo de la meta oficial del 7,5 por ciento para este año, que ya implica un mínimo de 23 años.
Como resultado, el liderazgo de China debe caminar por una delgada línea entre la necesidad de abordar la debilidad económica a corto plazo y la urgencia de aplicar las reformas previstas, ante el temor de retrasar los cambios en los sectores financieros y de manufacturas porque podrían llevar a un estancamiento similar al que experimentó Japón.
Atención en sector de bienes raíces
En particular, la mención del Politburó de “un desarrollo estable y saludable” de los bienes raíces llamó la atención de los mercados, al ser interpretado como un indicio de que Pekín no se arriesgaría a tomar ninguna medida radical para enfriar el sector, ante la preocupación por el impacto que podría tener en el crecimiento económico en general.
Esa postura fue reforzada el miércoles por comentarios de un alto funcionario del banco central, quien desestimó cualquier vinculación entre el “boom” inmobiliario y el crédito fácil.
Aquellas declaraciones ayudaron a impulsar las acciones de firmas que cotizan en la bolsa de Hong Kong.
Economistas dijeron que Pekín enfrenta ahora un difícil acto de equilibrio, pero que cuenta con cierto espacio presupuestario para salir adelante, el cual el Politburó sugirió que estaría dispuesto a usar.
“La política fiscal tendrá un rol mayor en apoyar a la economía, puesto que necesitamos mantener una política monetaria prudente”, sostuvo Zhu Baoliang, economista jefe del Centro de Información del Estado, un organismo de expertos del Gobierno con sede en Pekín.
“Habrá más exenciones impositivas y el déficit fiscal podría exceder el 2 por ciento del PIB (la meta)”, indicó, y agregó que esto debería permitir estabilizar el crecimiento en el segundo semestre del año.
Fuente: Reuters