Coworking: La nueva tendencia que facilita el trabajo a los emprendedores
13 de Octubre de 2014 - Destacados
El coworking es un lugar que ofrece diferentes servicios para que emprendedores y trabajadores independientes puedan fomentar el trabajo colaborativo en conjunto y crear redes de contactos, a través de un ambiente creativo.
Este sistema nace hace nueve años en San Francisco, Estados Unidos, y a Chile llega en 2011 de la mano de tres compañías; entre ellas Co-Work, que actualmente cuenta con cuatro sitios en Santiago y uno en un Uruguay.
“En 2009 iniciamos un emprendimiento que comenzó muy bien, pero luego de un año y medio fracasó. Nos cuestionamos qué anduvo mal y nos dimos cuenta que fue la poca información sobre temas básicos de hacer una empresa. Es ahí donde se nos ocurre crear un espacio donde emprendedores que estén en la misma sintonía pudieran trabajar y, al mismo tiempo, compartir sus experiencias; con el fin de evitar equivocarse en cosas simples que, por la poca experiencia, les ocurre en un principio”, dice uno de sus dueños, Horacio Justiniano.
“Sin duda es una nueva forma de trabajar que ha resultado ser muy exitosa por los beneficios que ofrece; es una alternativa viable para quienes buscan emprender con bajos costos de operatividad y para quienes buscan conectar con redes profesionales en un lugar agradable y multicultural”, complementa Esteban Quintana, socio fundador de Conectas, empresa que abrió sus puertas en marzo de 2013 en pleno corazón de Providencia.
Hoy existen más de 15 espacios de coworking en Chile. Si bien la mayoría se ubica en Santiago, también están en ciudades como Valparaíso, Temuco y Concepción. Uno de estos casos es UrbanWork, que comenzó a operar en marzo de 2014, convirtiéndose en el primer espacio de este tipo en la V Región.
Vicente Gómez, su creador y fundador, explica que “existe una problemática latente en Chile, hay alrededor de 1.600.000 emprendedores y no todos tienen su oficina propia. Esto se debe a que son muy caras o simplemente no les gusta trabajar en ellas. Las oficinas convencionales tienen un valor altísimo, sin considerar el gasto de implementarlas, pagar gastos comunes y mes de garantía. Hay personas que necesitan un espacio de trabajo con las necesidades básicas, pero con un valor razonable. Sólo los espacios de coworking ofrecen esta alternativa”.
Agrega que “la soledad laboral que se presenta al trabajar ya sea en una casa, cafetería o biblioteca disminuye la confianza de las personas, emprendedores o freelancers, ya que no tienen el constante feedback o ayuda que le entrega un entorno competitivo. Aquello también genera una falta de contactos, al trabajar apartado, y agotamiento por no poder separar la vida profesional de la vida personal”.
Arriendo por horas, días o meses
Internet, salas de reuniones, espacios para talleres, dirección tributaria y comercial, oficinas privadas y tutorías para habilidades estratégicas (ventas, legal, estructura societaria, modelo de negocios, etc.) son parte de los servicios que entregan las empresas dedicadas al coworking.
Las estaciones de trabajo se pueden adquirir por medio de planes por hora, día y mes. En el caso de Co-Work, una membresía mensual puede costar desde $60.000 (U$ 100) hasta $200.000 (U$ 337) , dependiendo del tipo del acceso y puesto de trabajo que necesite quien arrienda. Conectas, en tanto, entrega la alternativa de paquetes por horas que se miden como un prepago.
Por su parte, UrbanWork tiene precios que varían desde $1.500 (U$ 2.5) la hora hasta $100.000 la mensualidad (U$ 168). Las oficinas privadas cuestan $170.000 (U$ 286).
“Todo esto permite que las empresas y/o trabajadores tengan la flexibilidad de arrendar lo que necesiten y cuándo lo necesiten sin la obligación de largos contratos de arriendo, garantías ni espacio que no requieren”, comenta Horacio Justiniano.
Fuente: Emol