La tecnología reinventa las tiendas físicas

En un futuro cercano las tiendas y almacenes tendrán etiquetas que hablen entre sí y sistemas de señalización digital que harán la experiencia de compra mucho más atractiva. El comercio, tal como lo conocemos hasta ahora, está a punto de extinguirse y las tiendas tradicionales se están reinventando con nuevos sistemas tecnológicos.

Entre el 16 y 18 de septiembre se realizó en París la feria Equipmag, que muestra las últimas tendencias para el mundo del retail. Ahí, la empresa SES presentó su Sistema de Posicionamiento de Producto (PPS), un sensor interactivo de precisión para la geolocalización en tiendas. El sistema usa tecnología NFC y BLE Bluetooth de baja energía), así como etiquetas electrónicas, formando una red geolocalizada. Y es que cada etiqueta, además de estar asociada a un producto, se registra en función de las etiquetas adyacentes. Con estos datos, se puede determinar con exactitud el emplazamiento de cada bien en la tienda, guiando al consumidor a través del local.

Otra empresa, llamada Shopline, mostró una cámara 3D que mejora la precisión de los sistemas de recuento de personas. Gracias a la obtención de imágenes en tres dimensiones, la cámara obtiene una cifra más exacta del número de personas que hay en lugares, así como de los objetos que llevan encima, como maletas o coches.

Mientras que la japonesa Fujitsu mostró su solución de Punto de Servicio omnicanal orientada a servicios de aplicaciones (SOA) que simplifica las inversiones de los retailers y acelera la integración empresarial.

Miles de opciones

Claro que estos no son los únicos avances en esta materia. Una serie de otras innovaciones prometen cambiarles la cara a las tiendas hoy en día. Así, en un futuro cercano será común ver carritos de supermercado inteligentes con chips RFID (Radio Frecuencia Identificador) que le permitirán al cliente conocer al instante el precio del producto al momento de ponerlo en el carro e ir calculado el valor total de su compra antes de pasar por la caja.

Otra de las tecnologías que podrían incorporarse tiene que ver con las cámaras de seguimiento del comportamiento de compra. Estas cámaras digitales tendrán la finalidad de seguir el trayecto de los compradores en la tienda.

La tecnología RFID también les permitirá a los comerciantes identificar en qué momento quedan pocos productos en stock, mejorando así todos los procesos logísticos, además de la posibilidad de contabilización de los productos que entran (desde los distribuidores) o que salen (a través de la compra de los usuarios) de la tienda. Eso, por supuesto, ayudará a agilizar el conteo de inventario y su reposición.

Fuente: El Mercurio