China, los commodities y el tipo de cambio, claves en la desaceleración de América Latina
5 de Agosto de 2015 - Destacados
China está experimentando una desaceleración y diversos especialistas han advertido que si todos los países de la región no buscan una solución conjunta, de poco valdrán los esfuerzos individuales.
1. ¿De dónde viene el golpe?
La economía mundial está atravesando momentos difíciles. Por un lado está la crisis de Grecia y su enorme deuda. Por otro está el mercado accionario chino, que sufre un desplome masivo reflejado en un corrección de 30% en tan solo unos días. Según un informe del Banco Mundial, esta situación es delicada para Latinoamericana, que este año vivirá su peor año desde la crisis económica de 2008.
2. Territorio en problemas
Un informe publicado en CNN Expansión explica que la situación es tan grave que en la región se encuentran los dos países que registran los peores niveles de desaceleración a nivel internacional. Uno es Colombia y el otro Perú, que en 2015 han retrocedido 13 y 12% respectivamente.
3. Se vienen las vacas flacas
Según el citado informe, la frágil situación de la región se debe a a “las tres C”: China, las materias primas (commodities) y la moneda (currency). América Latina floreció la última década cuando sus materias primas, como el hierro, el cobre y los alimentos, gozaban de gran demanda por parte de los chinos. Ahora sus empresas de construcción están pisando el freno mientras su Gobierno intenta paralizar el sangrado en su mercado de valores.
4. El dólar más caro
Pese a que Estados Unidos está intentando recuperar terrero, China es el principal socio comercial de muchos países de la región. Al comprar menos productos, la economía latinoamericana colapsa. El dolar también es un problema. El aumento de su valor ocasiona que sea más más caro comprar importaciones y para las empresas resulta más caro pagar deudas en esa moneda. ¿Tendrá respuesta América Latina para este problema o regirá la lógica del “sálvense quien puede”? La historia tiene muchos ejemplos para la misma lección: andando solos en la jungla económica, no se salva nadie.
Fuente: Capital