¿Qué causa las grandes recesiones, el endeudamiento o la riqueza?
6 de Junio de 2016 - Destacados
Existe un debate importante, pero discreto, entre los profesionales de la economía acerca de qué es lo que causa las grandes recesiones: la riqueza o la deuda.
Casi todos coinciden, a estas alturas, en que la Gran Recesión de los años 2007 a 2009 fue causada por el sistema financiero. Pero eso hace que uno se cuestione qué es, exactamente, lo que ocurre en un sistema financiero para que lleve a la economía a una crisis. Los modelos económicos formales no son muy realistas en materia de perturbaciones financieras. Por lo general, asumen que el daño proviene de una alteración en el sistema bancario, que actúa como un cuello de botella en el suministro y obstaculiza la actividad económica.
Por lo tanto, los economistas se preguntan qué tipo de desastres financieros causan el mayor impacto en la demanda. A grosso modo, las respuestas son los efectos de la riqueza y el sobreendeudamiento. La escuela que habla sobre los efectos de la riqueza sostiene que cuando la burbuja de activos revienta, la gente de repente se siente más pobre. Esto hace que reduzcan el gasto, lo que envía a la demanda directo a una crisis. Por otra parte, la escuela que dice que la causa es el sobreendeudamiento cree que la gente tiene cambios repentinos en la disposición para asumir deuda –cuando reajustan sus balances, dejan de gastar.
Si los efectos de la riqueza son el gran culpable, entonces el control de las burbujas de activos pasa a ser la principal tarea para evitar una recesión. Si es la deuda la que la provoca, entonces la clave está en evitar que los hogares se endeuden tanto.
Uno de los documentos más famosos, escrito por los economistas Atif Mian, Kamalesh Rao y Amir Sufi, halló en 2013 que el descenso de la riqueza de los hogares tenía un gran impacto negativo sobre el consumo.
Los autores dicen que la deuda es peligrosa, ya que permite una mayor especulación en tiempos de auge, lo que impulsa los precios a un alza exagerada, solo para verlos caer más tarde. También dicen que la deuda hace un mal trabajo cuando se trata de protegerse contra el riesgo, y que puede conducir a procesos legales costosos e ineficientes como la ejecución hipotecaria.
Otros economistas por ejemplo, Greg Kaplan, Kurt Mitman y Giovanni Violante reformularon el análisis que hicieron Mian y los otros utilizando los datos públicos disponibles. Se centraron en las zonas donde los precios de las viviendas bajaron más y comprobaron si el consumo había caído más en esos lugares.
Entonces, ¿cómo podemos conciliar el hallazgo histórico de que la deuda exacerba las burbujas con la evidencia microeconómica de que el efecto de la riqueza es el factor más importante? Una posibilidad es que las burbujas inmobiliarias –que generalmente implican más deuda– simplemente afectan a la clase media con mucha más fuerza que las burbujas bursátiles. Si ese es el caso, significa que gran parte de nuestro enfoque reciente en el apalancamiento de los hogares podría estar equivocado. La verdadera tarea para los responsables de las políticas no radicaría en evitar que las personas se endeuden, sino en evitar que su riqueza caiga precipitadamente.
Fuente: Ieco-Clarín